Bienvenidos

Este blog es un punto de encuentro para todos aquellos que tomamos la decision de andar por el camino. De descubrir lo que existe mas alla de nuestra vida cotidiana. Es el despertar de la conciencia. Es el amarnos como seres unicos e irrepetibles.

martes, 7 de agosto de 2012

Efectos de la Respiración- Nei Kung

 Al isnpirar, la fuerza -vital penetra dentro de los nervios-psiquicos derecho e izquierdo. Estos se expanden, como si se distendiesen con el aire; y allí la fuerza-vital ingresa en el nervio-medio, y, golpeando contra la A-corta capilar (o media A), la llena en su forma roja plenamente configurada. Y mientras el "llenado2 y la "igualación" continúan de esta manera, concentra tu mente en estos procesos.
 mientras exhalas, imagina que la respiración va saliendo del nervio-medio, en corriente azulada ( la benéfica influencia psíqica simultànea a la fuerza-psíquica)
 Sin embargo, la resiración tiene en realidad su salida a través de las fosas nasales. Piensa que cada una de esas respiraciones la llama se eleva medio dedo más arriba; y que mediante ocho de esas respiraciones alcanza el centro- nervioso del ombligo.

Con esas dieza respiraciones, todos los pétalos de los nervios-psíquicos del centro-nervioso del ombligo se habrán llenado de fuego-psíquico.
 Con dieza respiracíones más, el fuego se desplaza hacia abajo y lena todas las partes inferiores del cuerpo, incluso las puntas de los dedos de los pies.
Desde allí, con diez respiraciones más, se enciende hacia arriba y llena todo el cuerpo hasta el centro-psíquico del crazón.
 Con diez respiraciones más, el fuego se traslada al centro psíquico de la garganta. Con diez respiraciones más alcanza la coronilla ( el Loto de Mil Pétalos).
con diez respiraciones más la visualizada letra Ham, dentro de la coronilla, se disuelve mediante el fuego psíquico en la fuerza-vital secreta del transmutado " Fluido-Lunar" o " Fluido-generativo" y éste llena el centro-nervioso psíquico del cerebro.
 Aqui es cuando se rocesa el amrita o néctar de la inmortalidad.
Con diez respiraciones más, llena el cetnro del nervio psíquico de la garganta.
Con diez respiraciones más, llena el centro del nervio psíquico del corazón.
Con diez respiraciones más, llena el centro del nervio psíquico del ombligo.
con diez respiraciones más, todo el cuerpo se llena hasta la punta de los dedos de las manos y los pies.
 Aprendiendo así el "Proceso de Ordeñar", estas 108 respiraciones constituyen un Curso de ejercicios.
Esto constituye el arte de dirigir el cuerpo, la mente y la vitalidad, para la producción del Calor Psíquico Tummo (Kundalini).
Llamándose: "Procesos ejecutivos del calor Psíquico"

Fuente: Yoga Tibetano y Doctrinas secretas. Evans-Wentz. Editorial Kier S.A.

La Última Alquimia trascendental

 Una vez Bernardo, cuando era estudiante universitario,oyo de un compañero la existencia de un maestro llamado Simón el taoísta que no hablaba desde hace muchos años. Cuando el preguntó la razón éste no supo responderle.
 Semejante misterio lo llevó a investigar hasta que finalmente, llegó a la casa de Simón el taoísta, y despues de preguntarle por la razón de su silencio, éste sólo le entregó una nota (pues no hablaba). Y así fue como Bernardo, perplejo, supo de la extraña forma de pensar y sentir de Simón el taoísta.
 Seguramente, estimado lector, usted querrá saber que decía esta nota. Bueno, por ello estoy escribiendo este cuento.
La nota desía lo siguiente:
 " La Nada y el Todo, el Vacío y lo Lleno del Tao, es el Silencio Mudo del taoísta.
Porque,
a la Nada taoísta no se le debe entender como ausencia,
sino como un Todo que no puede ser definido ni explicado, por eso se dice que es Nada.
Pero no es la Nada, sino el Todo inexplicable.
Al vacío taoísta no debe entendérselo como carencia,
sino como lo Completo que nunca puede ser llenado ni reblasado, por eso se dice que es Vacío.
Pero no es el Vacío, sino el Contenido que nunca puede ser completado.
Ni la Nada mi el Vacío tienen realidad existencial en si misma,
y el Todo y el Contenido existentes no son la Escencia Trascendente, por lo tanto, se dice entonces,
que el cotenido y Todo manifestados, es el Vacío y Nada proyectados.
Y cuando puede llegarse a distinguir que el Todo y la Nada son lo mismo, y que el Vacío y el Contenido son circunstanciales, el Silencio se vuelve Uno con la Conciencia del alma que lo vislumbra.
De este modo,
ya sea ante las expresiones efímeras de la vida diaria
como ante las majestuosidades cósmicas de la Existencia eterna,
el conocedor taoísta no sabe otra cosa que ermanecer esimismadamente mudo."
Fuente: Libro: Última Alquimia Transcendental.

sábado, 14 de julio de 2012

Continuidad sin interrupción

Xiang liau bu duau
 La fuerza de los que practican los sistemas externos es la energía grosera del "cielo posterior". Por lo tanto la hacemos empezar y terminar, continuar y parar. La fuerza inicial se agota antes de que surja la nueva. En este nivel uno es facilmente derrotado por otros.
Como en el Tai Chi Chuan se utiliza el pensamiento y no la fuerza, todo esta ligado sin interrupción del principio hasta el final; cuando una revolucion se terina otra comienza, el movimiento circular se desarrolla infinitamente. Dice el Tratado original: " El largo boxeo es como la ola de una largo rio o del mar que se mueve continuamente y sin fin".  Tambien: " Haced que la energía se mueva como un hilo de seda que se devanan de un capullo". Todo esto expresa la idea de que todo está unido por un solo hálito (Qi)







Fuente: El libro del Tai Chi

martes, 15 de mayo de 2012

El fluir del Tai Chi II

 Mantenerse de pie como una balanza y rotar activamente como una rueda.
Hundiendonos a un lado, podemos fuir (desplazando el centro de gravedad hacia un lado, podemos fluir).
Si el peso está en ambos pies, nos estancamos.
El que haya practicado por muchos años y aún no lgre neutralizar, Controlado siempre por su oponente,
no ha captado todavía el error del doble peso.

Para evitar este error hay que conocer yin y yang.
Adherirse es ceder y ceder es adherirse
Yin no puede separarse de yang.
Yang no puede separarse de yin.
Cuando yin y yang se ayudan mutuamente,
se comprenderá ña fuerza interior (Tong-chin) correctamente.
Fuente: TRatado de Tai Chi Chuan Lun. Wang Tsung-yueh.




viernes, 4 de mayo de 2012

FENG SHUI, LA ARMONIZACIÓN DEL HOMBRE CON SU ENTORNO

En general, es muy poco lo que se conoce acerca del Feng Shui y tendemos a asociarlo con la posición de los muebles y los objetos del hogar. Pero el Feng Shui es algo más ¿Cuál es su verdadero sentido? Tratemos de profundizar en esta sabiduría milenaria para aclarar algunas de nuestras dudas

Todos hemos vivido en alguna ocasión la experiencia personal de entrar en una casa o local de negocio, y, sin razón aparente, tener una sensación de malestar, incomodidad o angustia, así como por el contrario, habernos sentido relajados, tranquilos y cómodos. Todas estas impresiones se deben a la natural percepción que todo ser humano tiene (en mayor o menor medida según su sensibilidad), ante el ambiente que se genera en los recintos y que suele ser una suma de factores tanto objetivos como subjetivos. Pero no sólo en el interior de las casas sentimos estas percepciones que influencian nuestros estados psíquicos -facilitando o dispersando nuestra concentración, cansándonos o relajándonos, creando atracción o repulsión-, también las percibimos en contacto con la Naturaleza: una suave brisa impregnada de sutiles olores de plantas aromáticas, el gratificante verdor de un valle tranquilo, el canto de los pájaros al amanecer, etc.
Toda esta amalgama de colores, sonidos, formas, luz, movimiento, son la expresión misma de la vida que fluye por doquier, de unas energías que interactúan con las del hombre de forma benéfica o nociva. En todas las culturas antiguas hubo hombres que se preocuparon por estudiar estas interrelaciones que existen entre las energías cósmicas, las de la Tierra y su atmósfera, y las del hombre, siendo la tradición china (denominada Feng Shui) la que ha llegado mejor conservada hasta nuestros días.
El Feng Shui («el viento y el agua») es una ciencia y un arte milenario que busca la armonía del ser humano con el entorno natural o arquitectónico que lo rodea, usando para ello los elementos naturales y de la construcción, con sus materiales, formas, colores, objetos y decoración, a fin de equilibrar el tiempo, el espacio y el hábitat, con sus habitantes, para lograr una mejor calidad de vida. Estos conocimientos se pueden aplicar a una casa de campo o ciudad, un apartamento, un local comercial, una planta industrial, etc., en donde todo lo que sea construcción, hábitat, distribución de habitaciones de la casa... es diseñado, instalado y decorado en función de ciertos criterios topográficos, magnéticos y estéticos.

La filosofía del Feng Shui, en su enorme sabiduría, nos enseña que estamos profundamente influenciados por el medio en el que vivimos. El lugar que ocupa el hombre en el Universo depende de la relación dinámica entre nuestras energías personales y las energías que moldean la Naturaleza y el medio ambiente que nos rodea. Por ello, las acciones humanas deben buscar mantener el equilibrio entre el hombre y la Naturaleza, y así lograr vivir en armonía con ella. Debemos conservarlo de forma que nos brinde y promueva el desarrollo interior, la cooperación familiar, la productividad en los negocios y la excelencia humana en general, ya que este equilibrio armónico de la energía individual con la del entorno, facilita el crecimiento personal en el más amplio sentido de la palabra, reflejándose en todos los aspectos de nuestras vidas.
El Chi

Llamado por los taoístas «el Aliento del Dragón», el Chi es la energía que fluye en nuestro cuerpo y en todo cuanto nos rodea: ríos, montañas, plantas, animales, el mar y, por supuesto, en cada uno de nuestros hogares, puesto que también tienen su Chi particular. Los chinos nos hablan de un universo vivo alimentado por el Chi, que en el cielo es Chi Celeste, en la tierra Chi Terrestre y en los hombres Chi Vital.

El Chi Celeste es la energía cósmica que mantiene unido al Universo, y entre otras cosas nos habla de cómo la posición de los planetas y las estrellas en el momento de nuestro nacimiento pueden marcar nuestro destino: es la ciencia de la Astrología. También es la influencia climática, como la luz solar, la lluvia, el viento, el frío y el calor.

El Chi de la Tierra viene de las formas que modelan nuestro entorno, ya sean naturales o hechas por el hombre: las montañas, la vegetación, los ríos, los valles o las construcciones en que vivimos, formas, colores, distribución, diseño... También son los campos magnéticos de la Tierra, fácilmente medibles con una brújula, un aspecto importante del auténtico Feng Shui.

El Chi del hombre es el Chi Vital. Según la medicina china (la acupuntura), el Chi Vital circula en nuestro cuerpo a través de los meridianos. Cuando el Chi se estanca, vienen las enfermedades y el acupuntor actúa para reestablecer el flujo armonioso del Chi. El Chi del hombre es también nuestra personalidad, nuestros ideales, nuestros pensamientos: la influencia cultural, política y social; la familia, la pareja con que vivimos, los vecinos, las actividades humanas de nuestro entorno.
El Feng Shui estudia cómo el Chi recorre nuestra casa a través de las habitaciones y pasillos, entrando y saliendo por puertas y ventanas, acumulándose aquí o dispersándose allá. Cuando el Chi fluye libremente, las personas son positivas y disfrutan de una existencia armónica. Si el Chi se estanca, surgen problemas en la vida cotidiana o en las metas y proyectos de quienes viven allí.

Chi Positivo y Chi Negativo

El Chi puede ser positivo o negativo. Existe el Sheng Chi, que es el Chi positivo, que da vida y se mueve de forma ondulante. Cuando el Chi fluye positivamente, las personas disfrutan de una existencia armónica. Por otro lado, existe el Sha Chi, que es el Chi negativo. Este debilita y se mueve en línea recta. Cuando una casa tiene un Sha Chi, es porque el Chi está estancado o se ha acelerado. Las personas tendrán problemas en su vida cotidiana, en salud, en sus metas o relaciones.

No es necesario tener un sexto sentido para revisar el Chi de un lugar. Basta que observemos con nuestros cinco sentidos. Cuando la tierra es fértil y vemos árboles frondosos, césped verde y un jardín que florece, es síntoma de buen Chi. Un lugar lleno de maleza o la tierra gastada por la erosión, árboles débiles... son signos de Sha Chi. El agua limpia, moviéndose de forma serpenteante está cargada de Sheng Chi, no así el agua estancada, contaminada o una corriente muy rápida. Animales salvajes o domésticos sanos, canto de pájaros... significan buen Chi, mientras que la presencia de ratas o perros flacos y de feo aspecto son muestras de mal Chi. Cuando una casa está limpia, ordenada, con luz y ventilación adecuada, y las personas tienen amor y alegría, hay un Sheng Chi. Por el contrario, una casa desordenada, oscura, donde reina el conflicto y las discusiones, tiene un Sha Chi.
También debemos considerar el entorno humano. El Feng Shui no le recomendaría una casa que esté delante o cerca de un lugar conflictivo, relacionado con la violencia, la muerte, el dolor o la enfermedad, como un hospital, un cementerio, un matadero, un burdel, una estación de policía... Totalmente opuestos serían lugares con buen Chi, como un parque, una plaza, un jardín infantil, una biblioteca, lugares de servicio público, una casa de la cultura, un centro vecinal o un lugar de medicina alternativa o crecimiento personal.

   Ejemplos de factores que provocan bloqueos y producen Sha Chi podrían ser: grandes edificios ubicados muy cerca unos de otros, sin espacio para la luz solar y la brisa; un árbol o poste bloqueando la puerta de entrada de tu casa; una casa al fondo de una calle sin salida; una estructura arquitectónica en ángulo recto apuntando hacia una casa; un espacio recargado de muebles y objetos pesados; el desorden y la suciedad; una puerta de entrada alineada con la puerta de salida; un vestíbulo oscuro y depresivo, etc.

Por otra parte. Son ejemplos de Sheng Chi: una casa que tenga una buena protección a su espalda (una montaña o edificio más alto); un espacio abierto delante, despejado, con una buena vista, un patio delantero o un parque o plaza frente a la casa; una casa que tenga a los lados estructuras protectoras; un piso en la zona media del edificio, ni en los primeros pisos ni los últimos; el camino interno que va hacia la casa es preferible que sea curvo y sinuoso antes que una línea recta y no debe haber objetos que lo obstaculicen, ya que esto bloquea la energía nutriente; la puerta de entrada debe estar bien cuidada, ya que es la cara de nuestro hogar. Debe mantenerse bien pintada o barnizada, con sus manillas y bronces brillantes y un bonito felpudo, en definitiva, debe ser un lugar que dé la bienvenida; jardines con flores y árboles perennes son benévolos, ya que se asocian con el crecimiento y son símbolo de prosperidad; preferiblemente la casa debe tener una forma cuadrada, sólida y estable. Deben evitarse las formas de L o H; en la parte delantera de la casa, por estar más cerca de la calle, del movimiento y el ruido, deben ubicarse los sectores sociales -sala de estar, comedor, cocina-. En la parte trasera deben situarse las zonas de mayor intimidad, como los dormitorios. El dormitorio es el lugar de descanso, no se recomiendan allí ordenadores, televisores ni equipos de sonido; no deben ponerse espejos en las habitaciones, sino en la puerta de los armarios, pero por dentro; la limpieza y el orden son imprescindibles para que un lugar tenga buen Feng Shui, pues permite que la energía fluya con libertad. Donde hay desorden y suciedad, el Chi se estanca.

Del Feng Shui, al que se atribuyen más de 5.000 años de historia, han ido surgiendo múltiples escuelas que en tiempos modernos se han implantado y popularizado en Occidente. Sobre el tema se han publicado cientos de libros en todos los idiomas, se imparten cursos y conferencias, hay páginas web, revistas, etc., en donde las personas buscamos conocimientos que nos ayuden a mejorar nuestra calidad de vida, a conocernos mejor y, en definitiva, a ser más felices .
Fuente: Feng Shui